La minería ilícita no da tregua en la zona de «La Pampa», Madre de Dios, donde un enorme campo estéril atraviesa la selva amazónica producto de la búsqueda de oro. En este terreno, ubicado en la zona de amortiguamiento de la Reserva Nacional Tambopata, se estima que los mineros ilegales aumentaron sus operaciones en un 70% mientras las autoridades estuvieron ausentes desde diciembre del año pasado.
Hace poco, 900 policías fueron los encargados de esta intervención donde lograron incautar 87 motores, 105 tolvas y 20 mil metros de mangueras durante los días 13 y 14 de julio. El alto comisionado en asuntos de formalización de la minería, Antonio Fernández Jerí, anunció a El Comercio que tienen programadas siete intervenciones más hasta diciembre de este año.
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«Para entonces debemos tener controladas algunas de las zonas donde retornó la actividad ilícita por falta de continuidad», aseguró Fernández, quien también planea mantener una presencia constante del Estado en esta parte de la selva.
«La Pampa» está ubicada en la zona de amortiguamiento de la Reserva Nacional Tambopata, en el kilómetro 115 de la carretera Interoceánica. Según el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Sernamp), la cuenca del río Tambopata presenta uno de los mayores índices de diversidad biológica del mundo.
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Madre de Dios es la región con mayor presencia de minería ilegal en el país. Según información del Gobierno Regional, unas 30 mil personas se dedican a estas operaciones ilícitas. De acuerdo a una investigación de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), el 90% de la actividad minera en Madre de Dios es ilegal o informal.
Desbaratan ‘prostibares’ mineros
La explotación sexual de mujeres que, con engaños y amenazas, son llevadas hasta los más grandes centros de minería ilegal es una realidad que aún convive con la impunidad. En «La Pampa» el lugar más recurrido era El Mega 15, prostíbulo con fachada de bar que fue construido cerca de las cenizas de El Mega 14, local que había sido incinerado durante la última interdicción en Madre de Dios.
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En este operativo los agentes policiales lograron rescatar a 32 mujeres que ofrecían servicios sexuales en el campamento minero armado con troncos, calamina, plásticos y triplay. Los policías especializados en trata de personas y los fiscales aseguraron que la mayoría de mujeres encontradas eran menores de edad. Todas fueron transportadas hacia un albergue temporal en Puerto Maldonado.
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